Exuberantes terrazas verticales suben al costado de un nuevo edificio ubicado en uno de los barrios verdes de más rápido crecimiento de São Paulo. Diseñada por Victor B. Ortiz Architecture, la Torre Urupê es un magnífico ejemplo de diseño biofílico. Inspirado en el crecimiento de hongos en el tronco de un árbol, el edificio de uso mixto ofrecerá vistas panorámicas del área.
La exuberante vegetación de la fachada demuestra cómo las estructuras artificiales pueden armonizar con el mundo natural. Además del impacto estético, la vegetación también creará microclimas para compensar el impacto de la arquitectura. Las plantas juegan un papel en todas las facetas del diseño y están presentes en todos los lados del edificio. De esta manera, la gente podrá interactuar profundamente con la naturaleza, incluso en entornos urbanos.
Victor B. Ortiz Architecture, que tiene sus raíces en São Paulo, es muy consciente de los impactos ambientales que pueden tener los proyectos de construcción. Mediante el uso de materiales renovables y la incorporación de elementos naturales se intenta limitar o mitigar estos efectos. El estudio valora la importancia de crear espacios que sean a la vez funcionales y respetuosos con el medio ambiente.
La Torre Urupê es una impresionante pieza de diseño biofílico de Victor B. Ortiz Architecture.
Ubicado en uno de los barrios verdes de más rápido crecimiento en São Paulo, está inspirado en la forma en que crecen los hongos en los troncos de los árboles.
Las terrazas en cascada crean un jardín vertical que armoniza la estructura hecha por el hombre con la naturaleza.
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